Todas y todos queremos vivir en nuestros hogares de manera tranquila, con la seguridad que en el trayecto entre nuestro quehacer podamos transitar esta ciudad en armonía y sin problema alguno. Llegar luego de un extenso día laboral, ir a buscar a nuestras hijas e hijos, caminar, andar en bicicleta por la ciudad, manejar y realizar nuestra vida sin eventos, sin el miedo y sin la idea de que en el trayecto algo pueda afectar nuestra integridad física y psicológica.
Se dice que el delito está a la vuelta de la esquina, es ese acto que otro habitante de la ciudad que entre las penumbras busca y construye el momento para poder efectuar la sustracción de algún bien, dañando a vecinas y vecinos que solo buscan poder habitar la tranquilidad de la ciudad.
En esta imagen tan común no solo está presente el “delito de alta connotación”, robos y atracos con violencia, sino los llamados delitos de “cuello y corbata” como se hacen llamar en la oscuridad del mercado y de las instituciones la acción que realiza el delincuente que se alza para sustraer y sacar provecho de sus posiciones de poder.
Las cámaras y los dispositivos de vigilancia tan en moda desde los gobiernos locales no son la solución, ni pretenden serla, sin embargo, son eficiente al momento de dar “tranquilidad” a las comunidades, aunque no exista evidencia empírica sobre la eficiencia y muestre un débil impacto en delitos como el robo de propiedad privada o de alta connotación pública (Armitage, 2002; Medina Ariza, 2010; Waples et al, 2009; Díez-Ripollés y Cerezo, 2009; College of Policing, 2013). Donde si existe impacto es en el uso de sistemas de cámara de vigilancia en la prevención del microtráfico y delito asociado al robo de autos (Charest et al, 2010; Welsh y Farrington, 2009).
Es claro que el delito y la inseguridad que viven vecinas y vecinos no se consigue combatiendo con armamento tecnológico, dispositivo de vigilancias, algoritmos y tecnologías de mercado de la seguridad ciudadana, que hoy predominan en las promesas políticas. Se necesita hoy implementar otra mirada para abordar la problemática y si hay algo que la evidencia empírica pone en el tapete es la construcción de comunidad, poder empoderar nuestros barrios, habitar la ciudad por sobre el tránsito del trabajo hacia el hogar (Robert Sampson, 2008).
Los dispositivos de vigilancia son tecnologías y como tal tienden a estar obsoletas, desfasadas y a veces superadas por contextos nuevos. Como ejemplo las tecnologías de vigilancia de reconocimiento facial, hoy es tecnología añeja frente a la necesidad de que todas y todos debemos estar en los espacios públicos con mascarilla, con el fin de prevenir el contagio y transmisión del virus del covid-19.
La comunidad juega un rol importante en la prevención del delito, el entender que convivimos entre vecinas y vecinos, y que no estamos solo contra el miedo y el temor frente a la delincuencia.
En nuestra comuna de La Reina una de las organizaciones que han tenido un alto crecimiento son los comités de seguridad, que ha dado una respuesta colectiva a un problema que no es posible enfrentar desde la soledad de nuestros hogares.
En el año 2016 al 2021 aumentaron los comités de seguridad de 60 a 320 que hay en la actualidad, y hoy siguen creando más para enfrentar esta problemática de carácter barrial y comunal.
En esta formación de nuevas organizaciones de carácter comunitario y local, con el fin de hacer frente al delito de sustracción de bienes, asaltos y robos, está en gran medida la solución por sobre la adquisición de dispositivos de vigilancia. Dar poder a las comunidades, entender que el conocer y habitar los barrios es el principio para construir colectivamente seguridad, con relaciones colaborativas para enfrentar la delincuencia y la inseguridad que se vive. En esto es necesario políticas desde el municipio que permitan empoderar y colaborar con estas organizaciones de carácter comunitaria, dotando de información y datos, dar paso no solo a una colaboración y la buena voluntad, sino construir una infraestructura de datos e información para enfrentar el miedo. Esta inteligencia basada en evidencia, con mecanismos de recolección de datos y repositorios abierto a la comunidad, permite a todos los actores de la prevención del delito poder colaborar y generar políticas de alto impacto para las comunidades.
Esto es dar paso a superar la noción de seguridad ciudadana, heredera la seguridad nacional, hacia una seguridad humana, en donde nuestra humanidad, sociedad, comunidad, barrios y vecindad está en el centro. Entender la seguridad más allá del mero combate contra el delito, promoviendo el ejercicio de que los vecinos y vecinas puedan vivir en sus barrios y comunidades en paz, lejos del miedo y la angustia que genera la constante amenaza de la delincuencia, que puede estar presente en diversas formas, corrupción, destrucción ambiental, cohecho, carteles y otros tipos de delincuencia que puede ser más dañina a las comunidades que los delitos de robos de bienes privados.
La lucha contra todo tipo de delincuencia que afecta a nuestras comunidades, barrios, vecinas y vecinos es necesaria, desde una perspectiva de seguridad humana, entender como un derecho que entre todas y todos podamos vivir en paz en nuestros territorios, desarrollar nuestras vidas de manera completamente plena. Hacer juntas y juntos, contigo, La Reina que queremos, justa, digna y en paz, con todas y todos, construyendo el futuro de una comuna precordillerana en armonía y plena.
Bibliografía:
Armitage, R. (2002). To cctv of Not to cctv: a review of current research into the effectiveness of cctv systems in reducing crime. Londres: Nacro.
Charest, M., Tremblay, P., Boivin, R. y D’Elia, M. (2010) La télésurveiIlance policière dans les lieux publics: l’apprentissage d’une te-chnologie. Canadian Journal of Criminolo-gy & Criminal Justice
College of policing (2013). The effects of cctv on crime. What works briefing. Coven-try: College fo Policing.
Diez Ripollés, J. y Cerezo, A. (2009) La prevención de la delincuencia callejera mediante videocámaras. Regulación jurídica y eficacia. Política Criminal
Robert Sampson (2003) Vecindario y comunidad: eficacia colectiva y seguridad ciudadana
Medina Ariza, J. (2010). Políticas de seguridad ciudadana en el contexto urbano y prevención comunitaria. La experiencia anglosajona. Revista Electrónica de Ciencia Penal Y Criminología
Waples, S., Gill, M., y Fisher, P. (2009). Does cctv displace crime? Criminology & Criminal Justice
Welsh, B., y Farrington, D. (2009). Public Area cctv and Crime Prevention: An Updated Systematic Review and Meta-Analysis. Jus-tice Quarterly